En su pronóstico económico conjunto, los principales institutos tienen perspectivas comparativamente buenas en dos temas fundamentales a pesar de las malas noticias para el crecimiento económico total: el mercado laboral puede resistir la desaceleración económica con poco daño, y se espera un desarrollo de precios relajado.

Las cinco instituciones de investigación económica realizan el pronóstico por encargo del Ministerio Federal de Economía y está a disposición del Handelsblatt en extractos.

El cambio demográfico contribuye a que se espera que la tasa de desempleo se mantenga constante en un 5,6 por ciento en los próximos años. Para el año 2025, incluso debería reducirse al valor de 5,3 por ciento, como se preveía anteriormente para 2022.

Se espera también algo positivo de la inflación: en el presente año aún se sitúa en el 6,1 por ciento, pero se espera que para 2025, gracias a una fuerte reducción de los costos de energía, caiga por debajo del objetivo de inflación del dos por ciento del Banco Central Europeo (BCE).

En el desarrollo general, el diagnóstico comunitario ofrece aún peores noticias que las previsiones anteriores. Así, los institutos esperan una contracción del 0,6 por ciento para el desarrollo económico de Alemania en este año, un crecimiento del 1,3 por ciento en 2024 y, en el último año de la proyección, 2025, un 1,5 por ciento.

La política financiera también se ve directamente afectada por las cifras esperadas: gracias a la finalización de la ayuda económica por el coronavirus y la energía, la componente financiera del estado se reducirá significativamente. Para el año en curso, los institutos esperan un superávit financiero del estado de 90 mil millones de euros y para 2025 incluso solo de 48 mil millones de euros.